
Por Anthony Vásquez
Cazador de historias
@Thaulh
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UN SUEÑO LLAMADO
Savannah #ViernesDeHistorias
Savannah #ViernesDeHistorias
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VIERNES 21 DE AGOSTO DE 2015 Desde su aparición a manos de los seres humanos, la energía nuclear ha sido objeto de debate, en gran parte por el gran peligro que supone y el poder que otorga a la nación que la desarrolla. Si a esto le sumamos el recuerdo de los ataques a Japón por parte de E.U.A., comprendemos el porque la energía nuclear ha sido vista desde el punto negativo la mayoría de veces.
Pero justo en la década de los 50's en medio de las firmes tensiones y las heridas frescas, apareció un embajador de paz y progreso, que buscaba mostrar la benevolencia nuclear al mundo. "El NS Savannah" un buque civil atómico, el primero en su clase. Nombrado así en memoria de otro barco homónimo el SS Savannah que casi 130 años antes, fuera la vanguardia del vapor en la locomoción de los navíos cruzando el Atlántico. |
El nuevo Savannah fue botado en 1959, denotando líneas avanzadas y con un porte altivo que demostraba el avance industrial estadounidense. Su principal objetivo era hacer una ruta diplomática por diferentes naciones para que los gobiernos de las mismas conocieran el lado "bueno" de la energía nuclear.
Un barco nuclear emplea el calor que se produce de la reacción para generar vapor, mismo que genera altas presiones que se orientan hacia las turbinas con las cuales se hacen girar las hélices. Un funcionamiento sencillo, con menos partes móviles, con una autonomía de combustible que posterga el repostaje a periodos de lustros o décadas y una velocidad punta de 35 km/h.
El Savannah presumía estas ventajas pero así mismo se enfrentó en poco tiempo a los aun hoy en día problemas de enfriamiento y desechos nucleares en exceso, que como no cabían en la bodega de contención debían ser tirados al mar. Si esto no fuera ya problema, la bandera de concordia no funcionó y el Savannah debía pedir permisos especiales, así como cumplir requerimientos engorrosos en los puertos donde atracaba, esto debido a que las sociedades relacionaban al barco con el infierno vivido en Hiroshima y Nagasaki. La misión fue todo un fracaso, tan sonado, que el fastuoso barco solo navegó por cinco años y luego fue olvidado en un muelle de Baltimore. La energía nuclear como propulsor fue relegada al ámbito militar, solo quedando algunos barcos civiles nucleares, en su mayoría rompehielos rusos hoy en desuso.
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