SE VALE SENTIR
Que las emociones no detengan tus planes de vida LUNES 7 DE JULIO DE 2014
Es válido tener algún sentimiento fuerte o “negativo” pero
lo que no es válido es quedarnos estacionados en esta emoción.
Las emociones son un conjunto complejo de respuestas químicas y neuronales que forman un patrón distintivo. Estas respuestas son producidas por el cerebro cuando detecta un estímulo emocionalmente competente, es decir, cuando el objeto o acontecimiento, real o rememorado mentalmente, desencadena una emoción y las repuestas automáticas correspondientes. Las respuestas provienen tanto de los mecanismos innatos del cerebro (emociones primarias) como de los repertorios conductuales aprendidos a lo largo del tiempo (emociones secundarias). Según el psicólogo Paul Ekman, de la Universidad de California, el miedo, la felicidad, la ira, la repugnancia, la tristeza y la sorpresa aparecen en todas las culturas como parte del bagaje innato de cualquier individuo. Los sentimientos, en cambio, son la evaluación consciente que hacemos de la percepción de nuestro estado corporal durante una respuesta emocional. Los sentimientos son conscientes, objetos mentales como aquellos que desencadenaron la emoción (imágenes, sonidos, percepciones físicas…). Las emociones que no se perciben como sentimientos son inconscientes y, sin embargo, pueden tener efecto sobre nuestras conductas. |
|
Así pues las emociones duran segundos y muchas veces solo
los expertos en lectura de rostro pueden identificarlas, mientas que los sentimientos permanecen
dentro de nosotros el tiempo que decidamos siempre que los evoquemos a través
de algún recuerdo.
Hay sentimientos que son catalogados como “negativos” por las reacciones que desencadenan en las personas, sin embargo, también dentro de estos sentimientos podemos encontrar puntos positivos.
Hay sentimientos que son catalogados como “negativos” por las reacciones que desencadenan en las personas, sin embargo, también dentro de estos sentimientos podemos encontrar puntos positivos.
El enojo por ejemplo,
propicia reacciones agresivas, fuertes y duras en la gente, pero también sirve
para poner límites; nos enojamos porque alguna situación nos parece injusta o
nos desagrada y es a partir de este momento que podemos poner límites pues
también el enojo nos impulsa a hacer cosas. El enojo es un detonante de la
acción pero hay que tener cuidado y no permitir que el enojo sea tan grande que
no se puedan llegar a acuerdos o se lastime a la gente. El enojo como cualquier otro sentimiento tiene
escalas, así que si estamos instalados en un enojo de 10, lo ideal es esperar a
que el enojo baje para poder avanzar.
|
Otro sentimiento no positivo es la tristeza, ya que desde
pequeños nos han enseñado que no es bueno sentirse triste, e incluso crecemos
con la costumbre de contestar que “estamos bien” siempre (a pesar de que no lo
estemos). En cierta medida el sentimiento de la tristeza es bueno porque en ese
momento estamos pensativos y enfocados en nuestro mundo interior; podemos
reconocer quienes somos y cual es nuestra posición en cuanto a nuestro entorno.
Es un momento de reflexión, de preparación para resolver cualquier situación
que nos preocupa.
Se vale sentir, llorar, gritar, decir…. lo que no se vale es estacionarnos en estos sentimientos sin seguir avanzando con nuestros planes de vida.
Se vale sentir, llorar, gritar, decir…. lo que no se vale es estacionarnos en estos sentimientos sin seguir avanzando con nuestros planes de vida.
Nos gusta leer tus comentarios, te invitamos a que los escribas en el la sección de foro o en nuestras cuentas de Twitter y Facebook.